25/11/21

“El mejor modo de lograr el respeto al medioambiente es incidiendo con mensajes a niños y jóvenes. Yo lo hago a través del cuento”

 










Pregunta.- ¿Quién es Manuel Cortés Blanco?
R.- Ante todo un ser humano que ha tenido la suerte de ser médico de vocación, psicólogo por la UNED, escritor por necesidad, cuentacuentos con entusiasmo, papá de un Principito y una Sirenita... Y últimamente, de lo más respetuoso con nuestra Naturaleza, desde la convicción de que todos deberíamos cuidarla. En ello radica que ya no yo, sino el futuro de la Humanidad, siga siendo posible.

 

P.- En tu opinión, ¿esa labor educativa en favor del Medioambiente, puede conseguirse a través de la Literatura?
R.- El mejor modo de lograr el respeto al medioambiente es incidiendo con mensajes en ese sentido preferentemente a niños y jóvenes. Yo lo hago a través del cuento, a sabiendas del alto poder pedagógico que posee. Y es que la clave está en la formación. Si no sabemos que la simple colilla de un cigarrillo puede contaminar hasta 50 litros de agua dulce o que una botella de vidrio podría tardar hasta 4.000 años en degradarse, los seguiremos arrojando como si en ese gesto nada malo nos fuese a ocurrir.

 

P.- ¿Realmente el llamado "cambio climático" va tan deprisa como nos dicen? del libro con más relación con la actualidad, es más que una crónica de la corrupción en España de la clase política y empresarial.
R.- Ciertamente, así es. Pero no lo afirmo yo, lo aseguran los expertos en Climatología. En estos momentos no queda ningún ecosistema marino libre de contaminación, las zonas polares están batiendo récords de temperaturas máximas, el derretimiento de la Antártida avanza a un ritmo superior al previsto (con el riesgo consecuente de que suba significativamente el nivel del mar), nos estamos quedando sin glaciares, cada vez nos asomamos a más desastres climáticos... Pero parece no importarnos demasiado. Nadie piensa ahora en las generaciones venideras. Y de persistir en nuestra actitud, el llamado "límite de no retorno" empezaría a estar demasiado cerca.


P.- ¿Qué ofreces en tu libro "Catorce lunas menguantes"?
R.- A través de vivencias reales, reforzadas cada una con un relato, un mensaje claro y un lenguaje entretenido, pretendo informar para formar, sensibilizar conciencias para cambiar actitudes... Son cuentos en modo Verde para salvar un planeta Azul, dirigidos preferentemente a chavales a partir de los 12 años. En mi opinión y en la de muchos profesores, sería un libro muy recomendable para abordar en el aula la llamada "Educación verde", incluyendo la condición de "consumidor responsable" (verdadera alternativa para el cambio).


P.-¿Lo está trabajando ya algún centro docente?
R.- Sí, aunque al igual que en los cambios de actitudes, vayamos poco a poco. Me consta que hay institutos en León y Zaragoza (también se ha interesado por él un colegio francés de enseñanza de español) cuyos alumnos lo están leyendo con ese fin... E incluso que desde uno de esos centros, el libro se va a presentar al próximo Congreso Nacional de Ecoescuelas. Como diría mi amigo Nicasio después de leerlo, "he aprendido con él tanto, que no sabía que sabíamos tan poco sobre nuestra Madre Naturaleza".

 


Visita el sitio Camaleones en Carnaval y disfruta con sus propuestas:

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Catorce lunas menguantes, de Manuel Cortés Blanco. Obra ganadora del premio Liliput

Colección LILIPUT nº 7
ISBN: 978-84-17433-37-6 • 154 páginas. PVP 12,95 €
Ilustraciones de Raquel Ordóñez Lanza

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INFORMACIÓN DEL LIBRO:
Salvar la naturaleza puede ser, además de comprometido, divertido. A veces preferimos no conocer los estragos que el cambio climático está causando en nuestro planeta, que cada vez es mayor el número de refugiados climáticos como consecuencia de la sequía que arrasa el África Subsahariana, o que ya no queda ningún ecosistema marino sin contaminar.
            Este libro, en el que se aúnan cuentos para lectores a partir de los doce años con historias reales con las que están estrechamente unidas, pretende mostrar a los lectores más jóvenes que respetando nuestro planeta, cada una de sus especies, nuestro aire, nuestras aguas, sus historias y sus valores, estaremos invirtiendo en nuestro futuro; bajo la premisa de que allí donde quede corazón, cabeza y manos, existe una posibilidad para la esperanza. Sensibilizar en modo Verde para salvar nuestro planeta Azul es el deseo con que se escribe Catorce lunas menguantes, un libro que pretende dar enseñanzas sobre nuestro planeta por medio de cuentos divertidos y que hacen crecer la curiosidad por mundos desconocidos que están en el nuestro.

 


El autor: Manuel Cortés Blanco

(Zaragoza).
Es doctor en Medicina con la especialidad de Medicina Preventiva y Salud Pública, psicólogo, cuentacuentos, escritor... y desde su compromiso con la Educación Ambiental, responsable del programa León libre de plásticos de la asociación EducAmor?

            Es autor de siete libros: El amor azul marino (Premio Literario Amares, 2005), Cartas para un país sin magia, Mi planeta de chocolate (finalista del II Premio Internacional Vivendia de Relato), Siete paraguas al sol (VI Premio Nacional de Novela Ciudad Ducal de Loeches), Catorce lunas llenas (XXXVIII Certamen Literario Carta Puebla, XV de Cuentos), El amor en los tiempos del Mindfulness (XLI Certamen Literario Carta Puebla, XVI de Cuentos) y de Nanas para un Principito, en M.A.R. Editor.
            Ha participado en distintas antologías de cuentos, como el libro Somos deferentes.

            Ha ejercido labores de médico en cuatro de los cinco continentes. Como docente ha sido profesor –entre otros– del Instituto Universitario de Drogodependencias, en la Universidad Complutense de Madrid. En el año 2010 fue galardonado con un Premio Nacional Ulysses a la Investigación por su labor científica.

 


La ilustradora: Raquel Ordóñez Lanza

(León).
Es ilustradora, Maestra y activista de la Educación Artística a partes iguales. Estudió Técnico Superior de Grabado Artístico, además de ser Diplomada en Educación Musical y Lengua Extranjera, Graduada en Educación Primaria y Máster en Educación Artística.

            En la actualidad se dedica a la docencia, al desarrollo de pedagogías alternativas y a la investigación de la Educación Artística como herramienta de aprendizaje, especialmente en las facetas de Ilustración, Música y Literatura.

            Su principal musa artística son sus alumnos, su lema es que el arte ayuda al desarrollo integral de la persona… Y su residencia habitual está en las nubes —si quieren contactar con ella, busquen nubes de colores—, sobre todo aquellas que son muy esponjosas y dan ganas de comerlas.

            Es la ilustradora de Nanas para un Principito, en M.A.R. Editor.